Esta teoría fue descrita en 1983 por Howard Gardner, profesor de la Universidad de Harvard. Para Howard la inteligencia no es un conjunto unitario que agrupe diferentes capacidades específicas, sino una red de conjuntos autónomos interrelacionados entre sí.
Hablemos de Gardner para entenderlo mejor.
Howard Gardner proviene de una familia judía, refugiada de la Alemania nazi. Nació el 11 de julio de 1943 en Scranton, Pennsylvania. De niño y joven fue un entusiasta lector y pianista.
Recibió mucha influencia de Erik Erikcson y Jerome Bruner y, gracias a este interés, decidió formarse en la Universidad de Harvard en psicología y neuropsicología. Es un psicólogo estadounidense que contribuye en educación y en psicología.
Ha trabajado como profesor de educación y de psicología en la Universidad de Harvard, profesor de neurología en la Universidad de Boston, concretamente, en la facultad de medicina y, escritor de numerosos libros redactados gracias a su experiencia, sus investigaciones y sus teorías.
Howard Gardner es conocido, sobre todo, por su investigación sobre la mente y la inteligencia del ser humano. Después de haber investigado mucho las capacidades cognitivas del ser humano, en el año 1993, Gardner presentó su teoría más conocida: la teoría de las inteligencias múltiples.
Debido a su persistencia y tenacidad para romper los estándares de cómo se medía la inteligencia, la creencia de existía una única dimensión de esta; la importancia del coeficiente intelectual (CI) como herramienta confiable para evaluar la capacidad mental y etiquetar a las personas basándose únicamente en el CI;, sin considerar la composición completa de cada individuo, cuánto y cómo aprende, de que estrategias puede valerse para aprender.
Según su teoría, todas las personas tienen todas las inteligencias, pero en cada persona predominará más una inteligencia que otra, creando, así, tantos perfiles de inteligencia como personas existen en el mundo. Claro está, que el perfil de inteligencia de cada persona se puede modificar por la genética o por las experiencias.
Este sistema basado en las inteligencias múltiples ha servido para estimular las potencialidades y contribuir al mejoramiento educativo en los niños, especialmente por encontrarse en el clima efectivo y activo exigido por el siglo XXI.
Gracias a él, se han creado nuevos roles para los docentes y los alumnos en el contexto de cambios culturales y sociales marcados por la globalización, dentro de la educación formal e informal. Hoy por hoy podemos ver la educación con otros ojos, con una visión mucho más amplia.
En la actualidad Howard Gardner, sigue dedicándose a la docencia, se dedica a la dirección de un proyecto al cual llamó «The Good Project» y que a su vez coordina junto a un grupo de profesionales que se encargan de promover la excelencia y la ética en la educación, tratando diferentes temáticas como, el correcto uso del medio digital, la colaboración organizacional y la participación cívica.